Introducción
En el post anterior hablábamos de algo fundamental para entender el comercio, hablábamos de entender la forma de pensar, actuar y valorar que tienen las 5 generaciones que actualmente estamos conviviendo en este mundo.
A su vez hablábamos de cómo crear opciones para poder competir de "tú a tú" con las grandes cadenas.
Pero también entendemos que para poder realizar ese ambicioso proyecto aún faltaría mucho tiempo y decisión. Por tanto, en este post trataremos de dar otras opciones, ajustadas a nuestra realidad actual, para poder desarrollar y hacer competitivo el pequeño comercio de esta Ciudad. Como me decía mi abuela “tendremos que arar con los bueyes que tenemos”. Y máxime ahora que tanta falta va a hacer que estos pequeños comercio puedan desarrollar su actividad de una forma medio rentable.
Los principios a aplicar serán los mismos que los expuestos en el “cucha anterior” pero con unas “gafas” distintas.
Como siempre decimos, este post sólo tiene el interés de que si para alguna persona titular de un pequeño comercio le sirve para extraer alguna idea que aplicar en su negocio, nos daremos por satisfechos.
Queremos dejar esta premisa de partida,
“Estamos en unos momentos muy críticos donde el futuro de nuestro negocio dependerá de las decisiones que hoy tomemos”
Comencemos
En primer lugar sugerimos dar un repaso a los psicográficos y resumen generacional comentado en el post anterior por la importancia que representa para entender al público objetivo de tu comercio en cuanto a su forma de pensar, actuar y posicionarse.
A continuación seguimos comentando más características que se deben tener muy en cuenta para posicionar este pequeño comercio.
¿Cuáles son los mayores enemigos actuales del pequeño comercio?
1º Primero, aunque parezca mentira, el propio comerciante.
En muchos casos estudiados el pequeño comerciante en su mente sólo tiene un negocio para supervivencia, es decir, lo que tiene es un autoempleo y no un negocio. El comerciante tiene que “vestirse” por la mañana de empresario y quitarse el “traje” por la noche. Tiene que empezar a pensar como empresa, sin miedos, pensando siempre en “grande” y no en pequeño y asustado, porque de las decisiones que tome ahora y su forma de pensar forjarán su futuro. No esperes un futuro mejor porque tu futuro empieza hoy. Esta frase debe estar siempre en mente.
Y para eso, no basta con abrir la persiana por la mañana y cerrarla por la noche, hay que dedicar un tiempo, al menos a la semana, para leer y formarse sobre todo aquello que pueda aportar algo bueno para el negocio. Cuando leáis sobre temas empresariales pronto descubriréis algo muy importante y es que existen muchos factores como la globalización, factores de economía, de política etc que afectarán a vuestros negocios, no perdáis el tiempo en ellos, porque sobre ellos no podemos actuar, están fuera del alcance de vuestras manos, simplemente, analizarlos, ver en qué puede afectar a vuestros negocios y automáticamente empezar a pensar en qué tipo de venda podéis poner a la herida para sanar cuanto antes.
2º El Comercio Electrónico
No podemos obviar que el comercio electrónico ha irrumpido en nuestras vidas de una forma positiva para los consumidores y evidentemente negativa para los pequeños comercios.
¿Pero que es lo que ofrece realmente el comercio electrónico para afectarnos tan directamente?
Varias son las razones, entre ellas:
1º La comodidad de que prácticamente el producto está en tu móvil a cualquier hora.
2º Te permite comprar desde la comodidad de tu sofá. Yo, sin ir más lejos, ayer estaba pidiendo un libro por internet a las dos y media de la madrugada.
3º Te permite encontrar multitud de proveedores para el mismo producto, comparar ofertas, gastos de envío, garantías de devolución, etc.
4º No tienes compromiso con nadie, comprarás donde más te guste por el motivo que sea.
5º Los plazos de entrega ya no son problema, cada vez son más rápidos y efectivos.
6ª Con las Generaciones como la Baby Boomers y Generación X (ver el “cucha” anterior) está pasando algo que no se esperaba, el móvil ha hecho que sean cada vez más adictos a internet. Están perdiendo el miedo que por su propia edad tenían a las nuevas tecnología, y otro dato aún más importante, la mayoría de ellos no quieren sentirse mayores y se actualizan cada vez más a los nuevos tiempos. Ahora es cada vez más común ir empezando a ver gente de 55 o más años pagando con su móvil en gasolineras o supermercados. Basta con este sencillo ejemplo, hace unos 5-10 años nos reíamos cuando nuestros hijos iban con los pantalones rotos por todos lados, es la moda. Ahora no es difícil encontrarse con una persona de 55-60 años con esos pantalones puestos. Simplemente nuestro inconsciente actúa para que no se nos vea “viejos” ni pasados de moda. Por tanto, el riesgo para el pequeño comercio sigue sumando.
7ª El maldito “Amazón”, ¿progreso o retroceso?. Depende para quien lo mire, pero está claro que cadenas digitales de este tipo destrozan al pequeño comercio, excepto que, como dice el refrán “si no puedes con tu enemigo únete a él” es decir, quizá viéndolo desde otro punto de vista a lo mejor puedes encontrar a tus propios proveedores a través de esta cadena obteniendo grandes ventajas al ser un mayorista para ellos, haciendo de esa desventaja una ventaja.
8º Algo que puede parecer no muy significativo, pero cuando miras productos por internet encuentras su ficha técnica de casi todo, lo que te permite no sólo comparar precios y ventajas sino conocer con todo detalle el producto que estás comprando o buscando.
9º El miedo al pago digital está desapareciendo en prácticamente todas las generaciones. Las grandes plataformas han hecho las cosas bien, han dejado evidencia de que se puede confiar en ellas. Antes pagar por internet con tarjeta era un trauma para muchas personas. Esto desaparece cada vez más, ya son muy pocos los que desconfían de esto.
3º Grandes Superficies.
Estas han sabido atacar muy bien el punto débil del consumidor actual. Como comentábamos en el post anterior, me estoy refiriendo al FACTOR TIEMPO.
Las grandes cadenas conocen muy bien a esta sociedad cada vez más estresada, saben dónde les duele, y saben cómo y qué hacer para captar esa gran afluencia de público que les caracteriza. Y es que el tiempo es lo único que jamás se recuperará,
esto es sagrado, y nuestro el factor por el que el consumidor está dispuesto a sacrificar incluso precio y calidad. Basta ver, con la actual situación de pandemia, la subida que han dado a los precios de sus productos las grandes cadenas y encima siguen llenas de público a diario.
Por tanto, independientemente de la experiencia de compra que ofrecen a sus clientes a través de sus amplios y acondicionados locales, que no lo vamos a negar, le ofrecen la experiencia de saber que estarán allí de lunes a sábados con sus estanterías llenas para que elijan sus productos. Esta es su gran ventaja.
La otra gran experiencia de compra que ofrecen para combatir con la compra digital, que a su vez, también es competencia y grande para ellos, es la capacidad que tiene el consumidor de tocar, ver, oler, sentir, preguntar en el momento. Pero sobre todo, volvemos al factor TIEMPO
como variable indispensable para el nuevo consumo. El consumidor sabe que si compra un producto, lo lleva a casa, lo prueba, pero no termina de convencerlo, automáticamente a otro día va lo devuelve y puede cambiarlo o no por otro o tomar de nuevo su dinero. En la venta online puede suceder lo mismo, pero evidentemente el tiempo de ida y vuelta en muchísimo mayor rompiendo por completo el concepto de ese factor Tiempo. Eso lo saben muy bien las grandes cadenas y gracias a ello la venta online no les está haciendo tanto daño como al pequeño comercio.
4ª Aportando soluciones
Aportando nuestro granito de arena por si sirve para alguien nuestras soluciones, sin contar por la que apostábamos en el post anterior que es la que más nos gusta, para el momento actual y para esta ciudad entendemos que hay que actuar en dos direcciones, porque a pesar de todo lo antedicho existe otro elemento que no se puede obviar, la tienda física, el pequeño comercio no está muerto, herido sí, pero muerto NO, ahora, tiene que reinventarse.
Personalmente, quizá por nuestra perspectiva profesional, nos da mucha pena cuando vemos en Facebook esos post que dicen “compra en tu comercio de barrio”. Ojalá conseguir eso fuera tan fácil como poner un post en Facebook, pero por desgracia, hoy en día, requiere otras acciones mucho más profundas
Vayamos a esas soluciones, no todo está perdido.
1º Actuar a nivel “macro”.
Es decir actuar de forma genérica para conseguir público en abundancia. Aquí no vamos a descubrir nada nuevo, el público es el que es y el que hay, y el que podamos conseguir será simplemente robándoselo a las grandes cadenas y a internet, así de claro.
2º Actuar a nivel “micro”.
Es decir, el pequeño comercio en sí mismo como parte sistémica de un todo comercial para la ciudad.
1º Actuar a nivel “macro”.
Esto que vamos a decir quizá podría ser algo doloroso para alguien pero no es nuestra intención hacer daño alguno, es sólo una crítica a nivel constructivo. Tenemos un “Centro Comercial Abierto”, la verdad es que arquitectónicamente es un lujo, pero está carente de emociones. Este centro comercial abierto no ha conseguido hacer que el público se incline por él, para los ubetenses sigue siendo la “calle nueva”. No se ha activado nada que hiciese ir a comprar a él especialmente. No se ha conseguido atajar las debilidades
que hacen que el pequeño comercio se desarrolle y lo que es peor, no se han sabido fortalecer las grandes fortalezas que posee.
Sólo dos detalles, cuando se han hecho eventos como “la feria del stock”, “ La noche de Blanco”, nuestras preciosas jornadas del renacimiento, etc. la afluencia de gente ha sido muy alta. ¿Por qué? Simplemente porque se ofreció una experiencia de compra distinta, bonita, amable, generadora de emociones y como consecuencia el público responde perfectamente.
Pues eso es lo que debería ser permanente, al menos cada 15 días, crear algo que sea muy significativo, algo que genere nuestra propia marca ubetense, como por ejemplo podría ser “el día del centro comercial abierto”, acompañado de un nombre-logo y slogan potentes y llamativos, generaciones de buenas emociones por si mismos.
Un día, por ejemplo un sábado completo, dedicado al Centro Comercial Abierto, con horarios adaptados AL CONSUMIDOR, no al comercio, y si ha que cerrar a las 12 de noche, ¡pues vendito sea!, cortando el tráfico desde el mercado de abastos, que por cierto también se debería sumar a esta iniciativa) hasta el Hospital de Santiago.
Evidentemente esto favorecería a los comercios de la Corredera y calle Nueva, pero como colofón, el Hospital de Santiago podría habilitar sus espacios para que el resto de comercio pudieran poner un pequeño stand donde exponer sus productos, catálogos etc., el objetivo es mas generar presencia de nuestros comerciantes que venta, luego ahí estará la habilidad de cada uno para llevarlos a su tienda cada vez que tengan necesidad de adquirir productos que ellos posean. Pero al menos tendrán la oportunidad de llegar al gran público.
Si pudiéramos hacer unas encuestas os demostraríamos una cosa, muchas cosas que compramos por internet lo hacemos porque no sabemos que podemos conseguirlos aquí en Úbeda. Nos tiramos toda una vida conviviendo y no nos conocemos. Yo apostaría, es simplemente un ejemplo, que muchos de las cosas compradas en internet de tipo electrónico, por ejemplo, las tenemos y quizá a mejor precio en Icesur, Mara, Hiperlum, Bazar Ceuta, etc. (perdonar si me dejo alguno, pero es lo que os decía, no nos conocemos), y esto sí que es una pena y una capacidad de colaborar nosotros mismos con el hundimiento del pequeño comercio, sumando a todos los factores comentados, nuestra propia ignorancia. Por eso, el insistir en que todos los comercios que quieran pudieran estar presentes en este Centro Comercial Abierto.
¿Qué conseguiríamos?,
algo muy importante, conocernos mejor y crear una cultura de ocio para el momento de la compra. Cultura de compra que con la repetición se convertirá en hábito, creará marca y quizá compromiso y fidelización del cliente. Tocamos algo muy importante desde el punto de vista psicológico y que se ha perdido, las relaciones personales, tremendamente importantes para la vida en sociedad. Y evidentemente esto no sólo mueve el comercio, sino bares, cafeterías, etc…. amén de la atracción de público de ciudades colindantes. El fin, se trata de conseguir esa afluencia de público que ya no sólo irá a comprar “algo en concreto” sino que “picará” en muchas más cosas. (En el próximo post os explicaremos cómo funciona el cerebro humano y las emociones en el proceso de compra)
2º Actuar a nivel “micro”.
Un comercio no puede vivir de espaldas a su realidad, sin escuchar lo que el cliente le dice sin decir
porque simplemente se está sentenciando. El comercio debe reinventarse, y no nos estamos refiriendo con esto a sus locales precisamente, sino a lo que el nuevo consumidor demanda. Por ejemplo, un comercio no puede vivir anclado con horarios tradicionales, (yo desde que tengo conocimiento aquí son los mismos) hay que adaptarlos a lo que al consumidor facilite la compra. Es muy sencillo de entender, si cada vez son más las mujeres que se incorporan al mercado laboral y tienen un horario igual o similar al del comercio del barrio, ¿Cuándo compran?, los estamos poniendo en brazos
de Mercadona, Carrefour, Corte Inglés etc. porque sus horarios les facilitan la compra. Tampoco es cuestión de hacer más horas de trabajo sino de adaptar los horarios, ¿cuántos van a un comercio a comprar a las 10 de la mañana o a las 5 de la tarde?. Una observación, fijaros en las cantidades de barras de pan que venden los chinos a las 10 e incluso 11 de la noche. ¿creéis que los chinos están locos?.
Y otro factor muy importante a reinventar es la garantía de devolución de un producto. Y no nos estamos refiriendo a que no se haga, sino a que en la mente de la gente está grabado que donde no hay problemas para devoluciones es en la gran cadena e incluso internet aunque sus procesos sean más lentos. Ese punto débil también hay que atajarlo desde el punto de vista de marketing. Hay que romper esos esquemas mentales.
Y por último, formación. No todo el mundo tiene la inteligencia emocional y empatía que se necesita para estar frente a un público que encima sabes de la gran competencia que tienes detrás. Por eso insistimos tanto en la formación del personal e incluso del propio titular.
Por tanto, no todo está perdido, según los últimos informes en estudios sobre retail en España y en 2.019 la compra en tiendas físicas subió un 2%, del 46% al 48%, no es mala señal y seguro que en estos tiempos de pandemia este porcentaje creció.
Por todo lo cual insistimos en hacer un gran repaso a la propuesta de valor que cada comercio tiene. Cuando pase esta pandemia, si nuestra Alcaldesa o cualquier otra entidad nos presta un aula os podremos enseñar metodologías muy sencillas para reinventar esta propuesta de valor. Por supuesto sin coste alguno, esto es gratis para nuestros vecinos.
En fin, por hoy consideramos que bastante “chapa” os hemos dado. Como os decíamos antes, en el próximo post os hablaremos tocaremos algo de neurociencias aplicadas al comercio y os hablaremos, aunque sea de forma abreviada, sobre cómo funciona el cerebro y las emociones en el proceso de compra, os asombraréis de cuánto se puede conseguir cuando se entiende esto bien.
Seguimos
Cuidaros mucho
@Ariza-Consultores